Condiciones de trabajo extremas, picos estacionales y lidiar con maquinaria avanzada son solo algunos de los retos que los gestores de flotas de maquinaria agrícola deben abordar. Elegir acertadamente los lubricantes y adoptar el mantenimiento adecuado pueden facilitar enormemente estos retos en la agricultura.
La agricultura es un pilar vital de nuestra sociedad ya que constituye la base de la alimentación de las personas, implica a grandes plantillas laborales y suministra miles de millones de toneladas de materias primas al sector alimentario. Desde el arado hasta la cosecha, depende sobremanera del uso de maquinaria pesada. Y al igual que en la construcción y la minería, una lubricación inteligente permite que las máquinas sigan funcionando bien.
Los equipos agrícolas pesados se ven sometidos a importantes esfuerzos día tras día. Tractores, cosechadoras y cargadoras se ven sometidos a cargas pesadas, polvo y cambios de temperatura. Y además, cuando llega la cosecha, no hay posibilidad de retrasos. En ese torbellino que representa mantener las máquinas funcionando y cumplir con los plazos, es muy comprensible que los cambios de lubricante, su análisis y asegurar que se usa la lubricación adecuada no siempre es el objetivo principal. Aun así, aumenta el riesgo de averías imprevistas.
Trabajar con vehículos agrícolas lleva a los lubricantes al límite. Echa un vistazo a los principales retos de lubricación en el mundo de la agricultura de los que cualquier gestor de flotas debería ser consciente.
Trabajar el campo expone a los motores, las transmisiones, cambios de marchas y rodamientos a una fatiga mecánica extrema y a presiones de impacto repentinas. Combinado con las largas jornadas de trabajo, los lubricantes deben proporcionar una película de alta resistencia, protección antidesgaste y resistencia a la degradación térmica y a la cizalladura.
Los vehículos agrícolas están expuestos al polvo, barro y, en ocasiones, también al estiércol, lo cual aumenta el riesgo de entrada de contaminantes. Además de eso, el almacenamiento fuera de temporada expone los equipos a la humedad y a cambios de temperatura, haciendo que la resistencia a la oxidación y la corrosión sean igual de importantes. Los lubricantes deben impedir que la suciedad y las partículas de hollín se asienten, asegurar una separación eficaz del agua y permanecer estables con el tiempo para evitar su degradación.
Las máquinas deben arrancar a menudo en mañanas frías y seguir funcionando en tardes cálidas. Los lubricantes deben mantener una viscosidad estable para asegurar una protección de arranque en frío y evitar asimismo las pérdidas de viscosidad y la descomposición a altas temperaturas.
Las crecientes inquietudes por las fugas de aceite cerca de los campos y las fuentes de agua, junto con las normativas medioambientales, están motivando la demanda de lubricantes biodegradables. Estos productos deben proporcionar los mismos resultados y grado de protección que los lubricantes convencionales.
Saltarse los cambios de aceite, retrasar los análisis u optar por lubricantes de calidad más baja son siempre una tentación cuando tanto el tiempo como el presupuesto son limitados. Sin embargo, todo lo anterior repercute en el coste total de propiedad porque los riesgos de un desgaste acelerado, averías y consumo de combustible seguro que se disparan.
Para resolver eficazmente estos retos, los gestores de flotas pueden beneficiarse de la adopción de un enfoque proactivo y estructurado del mantenimiento y, más concretamente, de la lubricación y la gestión de fluidos. Investiguemos algunas prácticas recomendadas destinadas a evitar el desgaste y los tiempos de inactividad no previstos, además del control de costes.
La durabilidad empieza por la lubricación adecuada. Descubre nuestros productos
Seguro, las flotas de vehículos pesados agrícolas presentan un montón de retos de lubricación. Pero resolverlos no tiene por qué ser tan complejo. Basta con pedir asesoramiento experto, elegir lubricantes de alta calidad con aprobación OEM e implementar un método disciplinado en el mantenimiento de los lubricantes, incluida la concienciación de los operarios y su análisis oportuno.
Pronto cosecharás los beneficios, lo cual significa menos desgaste, menos averías, menos daños en los componentes y más horas de producción sobre el terreno, incluso cuando la meteorología va contra ti y tú corres contra el reloj.
Una flota de vehículos pesados bien lubricada no solo es más fácil de mantener, sino que te ayuda a acabar el trabajo a tiempo, con menos sorpresas y a un menor coste. Habla con nuestros expertos en lubricación y obtén asesoramiento a medida para tus vehículos, aplicaciones específicas y condiciones de trabajo.
